El lugar más profundo del cuerpo

Me introdujiste un beso en el lugar más profundo del cuerpo,

Desprenderme de él, es como buscar la ciudad sumergida,

A veces he intentado meterme la mano por la boca,

atravesar la traquea y los pulmones,

girar hacia el corazón y hurgar con los dedos a tientas

para ver si encuentro ese beso besado que me inyectaste desprevenida.

Lo que pasa es que cada vez que hago este intento,

me duele la boca,

Me duele la traquea,

me duelen los pulmones y

se me destroza el corazón.

El peso de pensarte

Dos párpados van cayendo,

por el peso de pensarte,

tu gravedad centrípeta

desviada hacia la izquierda,

Y mi elemento constate en movimiento,

bombea el líquido que me mantiene viva,

vivir es tocarte, el deseo de que estés

y que me tengas paciencia,

justo ahora,

cuando solamente puedo relacionarme,

con una furgoneta,

azul,

como el cielo que te despierta,

azul,

cada día,

azul,

enrollo los sedales

en mi guitarra de pescar, zapatos

y botellas antiguas, acordes en discusión

y Moby Dick en las antípodas.

Nubes de formas imposibles,

nuestros contornos enlazados,

solo formas vectoriales que deshace el viento,

estas son las partes,

que deben configurar mi sueño,

del que siempre advierto,

como una catástrofe,

aquello que me define a mi misma

y me concentro en que debes entenderlo.

Seguro que lo entiendes.

Dos párpados van cayendo,

por el peso de pensarte.

Paréntesis

-Hola.- ( Abro paréntesis y el tiempo se vuelve metálico, de plomo, se apropia de todas las dimensiones del mundo, torna_pesado, se para y apareces, me enseñas las cosas que existen y das a luz nuevas, la cena, la cama, el té, la sábana manchada de sangre, un nuevo deporte... el lanzamiento de... , una película, mi humo y tu humo, vestirme y desvestirme de tu piel, una plaga de besos, la cena, la cama, el té en un bucle infinito, cierro paréntesis.)

-Hasta luego.-